Si hay un elemento que se encuentre dentro de los grandes olvidados a la hora de realizar el mantenimiento de nuestro vehículo ese es la suspensión. Los periodos de sustitución de sus elementos son largos y eso lleva en ocasiones a despreocuparnos totalmente de sus estado.

Pero la suspensión es uno de los componentes más importantes para la seguridad de un automóvil y mantenerla en óptimas condiciones es clave. Además, ¿sabías que la suspensión es un factor que influye directamente en el desgaste de los neumáticos? Así que si tus cauchos tienen un desgaste irregular deberías valorar el estado de la suspensión.

Es de vital importancia realizar revisiones periódicas en talleres especializados. De esta forma un profesional podrá detectar posibles fallos en el sistema de suspensión que al conductor le pueden pasar desapercibidos, generar un desgaste prematuro de los neumáticos y provocar situaciones de peligro.

La suspensión de un automóvil cuenta con unas cotas concretas para su correcto funcionamiento, unas medidas que pueden variar por el uso o por golpes recibidos por las ruedas.

Convergencia y divergencia, caída y avance son los tres parámetros ajustables que influyen en el comportamiento del vehículo, en su seguridad y en el posible desgaste de los neumáticos, a excepción en este punto del avance, que prácticamente no influye en el desgaste.

Las ruedas del mismo eje no son totalmente paralelas, tienen cierta convergencia o divergencia, es decir, visto desde arriba las ruedas apuntan hacia dentro o hacia fuera respectivamente. Si estas cotas se modifican los neumáticos no rodarán correctamente y arrastrarán parte de la banda de rodadura.

Con un exceso de convergencia se desgastará rápidamente la parte exterior de la banda de rodadura, en el caso de un exceso de divergencia el desgaste se producirá por la parte interior del neumático.

La amortiguación también tiene un papel importante en la seguridad y en el desgaste de los neumáticos. Unos amortiguadores en un estado deficiente no permiten que las ruedas del vehículo dibujen correctamente las irregularidades del asfalto, por lo que éstas pierden contacto momentáneamente con el firme, reducen drásticamente el agarre y producen un desgaste irregular de los neumáticos.

Se recomienda revisar periódicamente la presión y desgaste de los neumáticos, además de revisar las cotas de suspensión en cada cambio de neumáticos o incluso antes si se detectan anomalías en el desgaste.

Fuente: https://frenomotor.com